Cría cuervos – Robert Bloch
Pronto recordó que la llave de la casa y la del coche estaban juntas, en un mismo llavero. Y Larry tenía el coche. Elinor cogió la bata y se aproximó de puntillas a la escalera, escuchando los pasos, que sonaban ahora en dirección a la sala. Bajó la escalera, muy despacio, y oyó un ruido parecido al que se produce al abrir los cajones de una mesa. Se asomó a la barandilla. Desde allí...